Nunca entenderé.

Nunca entenderé porque la gente se resigna a morir, porqué se conforma sabiendo que un día morirá.  Aún si les viera vivir cada segundo con pasión, podría entender algo. Pero no, ellos se sumen en la rutina, se dejan llevar por la marisma de gente. Se preocupan más de lo que disfrutan. Negar lo que queráis, pero solo una minoría ínfima disfruta de verdad la vida. Todos nos dejamos llevar por el letargo de nuestra existencia. Mientras negáis esto y os creéis felices, o quizá mientras me días la razón pensareis "¿Y tú qué? ¿Eres feliz en cada momento?"
No, por supuesto que no. Pero es que yo jamas me resignaré a morir. Sí, la inmortalidad no existe, o al menos no se conoce. Pero todas las noches cierro los ojos y comienzo a soñar. Y descubro mundos mágicos... Mundos de inmortalidad.
No obstante, existen muchos tipos de inmortalidad, y quizá consiga alguna... quizá el sueño se haga realidad, y aun cuando el mundo como es hoy, ya no se conozco, quizá aún, yo exista.

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